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domingo, 29 de julio de 2012


Violencia en la Huasteca, inhumana y sin sentido: Iglesia

El arzobispo, Jesús Carlos Cabrero Romero pidió a los potosinos orar por las víctimas de la delincuencia organizada en la Huasteca y a los jóvenes no dejarse seducir al llamado de las organizaciones criminales. 


Al finalizar la homiloia de este domingo, externó que “aunque hayan muerto de esa manera, hay una esperanza para ellos, espero la misericordia de Dios y más para quienes cometen estos actos sin sentido y deshumanos”.


Tras celebrar la misa del patrono de la Iglesia Montecillo, San Cristóbal Mártir, el máximo jefe de la Iglesia Católica en San Luis Potosí, lamentó que la ciudadanía se vuelva indiferente a la tragedia ajena, “cómo es posible que los potosinos nos estemos conformando con el oír cada día muertes y muertes y no hacemos nada”.


Convocó a adquirir una cultura sobre la vida desde el seno familiar, los colegios y universidades, porque inculcar el respeto a la vida no es tarea del gobierno, sino de todos.


Lamentó el desinterés de los jóvenes y niños en las religiones en general, a quienes ve abarrotar las plazas, los cines, y otros centros de convivencia más no los templos.

De igual forma deploró el deterioro del valor de la familia, que, dijo: , “cada vez se deja sentir menos, pues muchos jóvenes andan como ovejas sin pastor; ojalá se comprometieran con el bien, con cambiar las cosas que nos afectan y sean unos verdaderos líderes para nuestro país”, expresó. 

Por último observo que los jóvenes con principios honestos no tienen que formarse en las religiones precisamente, sino también en escuelas comprometidas con la educación de calidad, capaces de transmitir los principios y valores humanos necesarios para enfrentar los retos de la vida, concluyó.

Familiares ejecutados en Tanquián

En un hecho que avala el recrudecimiento de la violencia e inseguridad en la Zona Huasteca, hombres armados rafaguearon ccasi a la media noche del viernes a una familia entera (8 miembros) que se encontraba en una céntrica avenida del municipio huasteco de Tanquián de Escobedo.

Un total de tres hombres y dos mujeres quedaron muertos ahí, al ser alcanzados por las balas mientras que otros dos jóvenes y un niño de 10 años de edad resultaron mal heridos.

Los hechos se suscitaron diez minutos antes de las 11 de la noche del viernes, cuando los ruidos de una balacera sobre el bulevar Fray Andrés de Olmos, se escucharon por casi toda la cabecera municipal.

Tiempo después, elementos de Seguridad Pública y Tránsito Municipal salieron hacia ese lugar, pero tuvieron que desviarse y resguardarse, pues antes de que llegaran al lugar volvieron a escucharse las metrallas, por lo que solicitaron refuerzos al Sistema de Emergencias 066.

Desde Ciudad Valles salió un convoy de patrullas del grupo Plan Confianza de la Secretaría de Seguridad Pública Estatal (SSPE), y del Ejército Mexicano, quienes arribaron minutos antes de la medianoche.

Los soldados y policías encontraron los cadáveres de cinco personas que quedaron esparcidos sobre la avenida Fray Andrés de Olmos.

Se informó que en el exterior de la escuela secundaria número 4, estaba el cuerpo de un joven y adelante se encontraba parado un automóvil Mitsubishi Lancer blanco, con placas para circular VCE 4990 de esta entidad, que tenía varios impactos de bala.

En su interior estaba sin vida un joven y una muchacha, y a un lado del vehículo estaba el cuerpo de otra jovencita, mientras que el cadáver de un menor de edad fue localizado a unos 20 metros.

Todos murieron acribillados, y sobre el bulevar quedaron esparcidos decenas de casquillos percutidos calibre 7.62 de fusil de asalto AK-47 (cuerno de chivo).

Supuestamente los jóvenes fueron atacados por un grupo de hombres armados que viajaban en varios vehículos, pero extrañamente nadie vio sus características.

Alrededor de las 00:30 horas llegaron los familiares de las víctimas, quienes informaron a las autoridades que todos pertenecían a la familia Zumaya. Era primos o hermanos

Los muertos que se encontraban dentro del coche se llamaban Néstor Alfonso Zumaya Hervert de 24 años de edad, y Ana Rebeca González Argüelles de 24 años.

La joven que quedó a un lado de la unidad respondió en vida al nombre de Cristina del Carmen Zumaya de 26 años, y el muchacho tendido a 20 metros era Valente Zumaya Hervert, quien tenía apenas 17 años de edad.

Las autoridades informaron que en el ataque resultaron heridos Concepción Azuara Martínez de 46 años, Lidia Rivera Azuara de 17, y Edwin de Jesús Rivera Azuara de 10 años, quienes al parecer estaban en una taquería y fueron alcanzados por las balas.

Los tres fueron trasladados a un nosocomio de Ciudad Valles, y se desconoce su estado de salud. Solo el cuerpo del joven que quedo frente a la Secundaria Tecnica No. 2, no había sido identificado.


Extraoficialmente se dio a conocer que había dos jóvenes desaparecidos, uno de ellos menor de edad, pero las autoridades ministeriales lo mantienen en hermetismo.

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